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Las enfermedades autoinmunes se desarrollan a partir de un desbalance en la acción inmunológica sobre la biología natural del cuerpo, causando daños en los órganos y tejidos sanos.
Este proceso se conoce como autoinmunidad y hace parte de las enfermedades llamadas autoinmunes como el lupus, la artritis reumatoide, psoriasis, entre otros.
El espectro de estas enfermedades puede ser órgano-específico o sistémico. En el caso de la diabetes tipo I, su incidencia se produce en el páncreas. Otras enfermedades, tales como el lupus eritematoso sistémico (LES), su manifestación clínica es amplia en el cuerpo.
El punto de origen se desconoce. Se siguen estudiando posibles factores hereditarios en enfermedades como la artritis y el lupus, así como posibles factores ambientales que desencadenan tal reacción.
Las enfermedades autoinmunes tienen una prevalencia mayor en mujeres, adultos jóvenes o de mediana edad.
Entre las enfermedades autoinmunes más comunes, existen:
*Artritis reumatoide: Es un trastorno autoinmunitario que afecta primordialmente a las articulaciones del cuerpo, causando inflamación y dolor. Esto debido a que el sistema inmunitario no funciona de forma apropiada.
*Enfermedad celíaca: Esta enfermedad se conoce como un trastorno digestivo crónico que daña el intestino delgado y se produce por la reacción que tiene el sistema inmunitario al consumo de gluten. Esta reacción daña el revestimiento del intestino delgado causando una mala absorción.
*Lupus sistémica eritematoso: Consiste en una alteración de la autoinmunidad en donde el organismo produce en exceso una serie de proteínas, llamadas anticuerpos, que atacan algunas de sus células y órganos provocando daño e inflamación.
*Diabetes Tipo I: En la diabetes mellitus tipo I, el cuerpo no produce suficiente insulina o en ciertos casos no la produce en lo absoluto debido a la destrucción autoinmune de las células beta dando como resultado un incremento en los niveles de glucosa.
*Psoriasis: La psoriasis es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel, de origen autoinmune, en la que diferentes linfocitos T, así como queratinocitos y citocinas que se producen son implicadas en el desarrollo de la enfermedad. Esto hace que las células de la piel se multipliquen demasiado rápido acumulándose y formando parches rojos inflamados, comúnmente con escamas de placa color blanco plateado en la piel.
Las enfermedades autoinmunes tienden a ser crónicas. generando un impacto en la calidad de vida debido a la utilización de muchos recursos de salud en su rutina cotidiana. Por este motivo, la identificación en etapas iniciales pospone daños irreversibles en los órganos.
Los primeros síntomas de muchas enfermedades autoinmunes son muy similares, entre ellos:
fatiga
dolor muscular
hinchazón y enrojecimiento
fiebre baja
dificultad para concentrarse
entumecimiento u hormigueo en las manos o pies
La prueba de anticuerpos antinucleares (ANA) suele ser una de las primeras pruebas que utilizan los médicos cuando los síntomas sugieren una enfermedad autoinmune
Si existe una predisposición hereditaria o posee un cuadro sintomático, no dude en contactar con su médico o especialista
El control y tratamiento inhibe una respuesta inmune hiperactiva; ayudando a disminuir los síntomas con medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE) o medicamentos inmunosupresores.
Lograr un éxito adecuado durante el tratamiento incrementa la calidad de vida de pacientes que padecen este tipo de trastornos, si has sido diagnosticado con una condición autoinmune y deseas participar como voluntario en un estudio clínico impulsando el desarrollo de nuevos medicamentos, no dude en contactarnos.